El Gobierno anunció el cierre de exportaciones de carne por 30 días, una vez mas se toman decisiones absurdas, inconsultas e incoherentes. Engañándonos con su preocupación por la suba de los precios, deciden cerrar la exportación de carne, cuando el verdadero problema de la suba de precios está en la inflación y la única forma de combatirla es reducir el desmedido gasto político del cual ellos son los únicos responsables.
Volvemos a repetir recetas que ya han demostrado en reiteradas ocasiones fracasar.
La inflación no es culpa de los productores agropecuarios, el precio no lo define el sector. La enorme carga tributaria existente es la responsable de la inflación, consecuencia directa del excesivo gasto político.
La responsabilidad es del Gobierno, no de los ciudadanos.
La inflación desenfrenada es el enemigo numero 1 de los trabajadores. Cerrar las puertas de nuestros productos al mundo, no hará que los precios bajen, sino simplemente favorecer a nuestros competidores en el mercado.
Las medidas dañan una vez más a lo hombres y mujeres que hacen grande este país. El camino ineludible para el manejo de los precios es el de bajar las cargas impositivas, no hay otra alternativa.
Una vez mas el Gobierno prioriza pensamientos ideológicos buscando demonizar al sector agropecuario.
Es así que adherimos al cese de comercialización planteado por la Mesa de Enlace a partir del Jueves 20 de mayo. No tenemos más opción que tomar medidas para proteger al sector y a los ciudadanos.